“Los retos de la vida o te pulen o te vuelven polvo”!.
Podemos extrapolar de esta frase que, dependiendo de la actitud que asumimos ante los retos, perdidas, dificultades, conflictos y tropiezos varios que se nos presentan en el camino, es que se define si logramos “pulirnos” logrando un nivel más alto en nuestra evolución espiritual o si por el contrario este reto se convierte en un sufrimiento prolongado o compensado, habrá consecuencias devastadoras de índole físico o emocional.
Las situaciones difíciles nos están enviando el mensaje de que busquemos la solución entrando dentro de nosotros mismos ya que somos consciencia pura, la sabiduría infinita está ahí en nuestra presencia, para acceder a ella debemos acallar la mente y dejarnos guiar por nuestro verdadero Ser, tenemos que aprender a escuchar nuestro interior, también así podemos sanar nuestras heridas, y superar nuestras limitaciones, miedos y anclajes en el pasado que nos detienen o paralizan.
El mirar hacia adentro implica sacar nuestra propia verdad, es un paso que implica el abrir nuestro corazón y poner de manifiesto nuestras emociones que pueden ser dolorosas, nuestros condicionamientos y miedos paralizantes que se manifiestan en nuestra vida cotidiana, sin embargo, también y por el mismo motivo es una forma de hacer cambios profundos mucho más alineados con nuestros valores reales y crecer en nuestro auto conocimiento y nuestra propia verdad.
¿En este punto podríamos preguntarnos como se logra esto? Bueno cuando no estamos acostumbrados a entrar en contacto con nuestro ser interior podría ser algo desafiante pero muy valioso y para ello lo primero que se debe hacerse es simplemente “Rendirse”, eso significa Aceptar la realidad tal como está en el momento presente sin tratar de cambiarla, pero no con actitud de resignación sino de gratitud ya que todos los retos nos ayudan a crecer, es no oponer resistencia, intentar fluir con esa realidad sin importar lo lejos que esta esta de tus deseos, sin importar que tanto sufrimiento esta realidad te ocasione o creas tú que te ocasiona, solo abraza lo que está pasando, siente el dolor, siente la rabia pero no te centres en esos sentimientos solo déjalos seguir su curso, cierra tus ojos donde estés y siente tu cuerpo interior, siente tu energía interna, siente tus órganos internos como trabajan sin cesar por procurarte salud, por hacer que puedas funcionar física y mentalmente en forma óptima, siente la vida que vibra en ti ahí en tu interior y encuentra la sabiduría que te dará las respuestas que necesitas para sortear con tus retos diarios.
Hacer esto no es tarea fácil ya que el ego (yo) siempre intentara pelear y hacernos creer que nosotros tenemos la respuesta e intenta siempre ganar.
La fe y la gratitud vienen de nuestro ser interior y solo por medio de conectarnos con estas fuerzas es que encontramos la sabiduría y la fortaleza para proceder con asertividad y armonía ante los retos de la vida.
By Sonia Ortega B. Psicóloga Humanista.
